NO SE QUE ESPERAR DE LAS NUEVAS AUTORIDADES.

NO SE QUE ESPERAR DE LAS NUEVAS AUTORIDADES.

Yo he sido una de las personas más críticas con la actuación de las autoridades en materia de protección civil, lo he hecho por oficios, con comentarios directos y hasta públicamente, no es que yo siempre tenga la razón, pero lo que está mal está mal, igualmente, lo que está bien está bien, y me atrevo a hacerlo, no porque yo me las sepa de todas todas, o sea un erudito en la materia pero, tengo más de 50 años dedicado a la prevención y atención a emergencias, desde mucho antes que naciera en México la protección civil.

De igual manera, cuando se hacen las cosas bien y hay aciertos, yo soy el primero que lo reconoce y felicita.

Esto lo he hecho con todas las autoridades, federales, estatales y municipales, nada más como ejemplo, participe, aporte, hice observaciones, critiqué, reconocí y hasta felicité las acciones realizadas por la Coordinación General de Protección Civil SEGOB, en la administración de Felipe Calderón.

En el sexenio que en breve termina, la protección civil se congeló, por no decir que hubo un retraso, el 15 de septiembre impactaron a México los ciclones tropicales Ingrid y Manuel, no obstante que ya se tenían establecidos protocolos e instrumentados procedimientos, esa nueva administración no hizo absolutamente nada, ahora que van de salida, impactó a Nayarit el ciclón tropical Willa, y de los impactos de los sismos en 2017 ni comentamos, todos sabemos de las deficientes intervenciones de la Coordinación Nacional.

Ahora nos enfrentamos a otro reto, no sabemos que es lo que va a suceder con la protección civil en manos de la nueva administración, y sobre todo sabiendo que se pretende que quede bajo la tutela de Seguridad Pública, echo que ya se había superado.

Ahora, desde mi muy particular punto de vista, no es requisito indispensable que el titular de protección civil a nivel federal sea especialista en esta materia, lo importante es que sea un buen administrador publico y esté abierto para dejarse asesorar por personas con amplios conocimientos y gran experiencia, de los cuales hay muchos.

Hace unos días hubo una reunión entre el próximo titular de esta Coordinación Nacional que, inclusive se le quiere cambiar de nombre, y algunos especialistas en protección civil, lo que nos da un respiro, cuando menos ya hubo un acercamiento.

Afortunadamente, se está gestando una inercia muy especial con asociaciones, universidades, grupos independientes, etc., interesados en realizar actividades inherentes a la protección civil.

Como ya se dijo, los siniestros y los desastres no son obra del destino, ni son nada más porque sí, todos tienen su origen y un origen lógico, las causas de los accidentes, siniestro y desastres son generados por el comportamiento humano, por la idiosincrasia de los individuos, por la cultura (o incultura), por los factores atávicos, por el medio social, y muchos factores más, que no nos permiten aceptar que los riesgos son generados por el ser humano, que él mismo construye sus vulnerabilidades, y que su seguridad no depende de nadie masque de él.

Hoy es el aniversario de las explosiones de San Juan Ixhuatepec, otra vez la población de esa zona está solicitando que se salgan las gaseras de ahí, pero, ¿quién invadió esa zona que estaba marcada como polígono de seguridad?, efectivamente, el siniestro no debió haber sucedido, pero las muertes tampoco.

Las causas del siniestro fue responsabilidad de los técnicos de la gasera, pero las muertes fueron culpa de quienes fueron a instalar sus viviendas dentro de un perímetro de seguridad.

En fin, con el acercamiento que muchos especialistas ya tuvieron con las futuras autoridades en materia de protección civil, estás sean sensibles a la necesidad de trabajar con la sociedad civil, no nada más estarla hostigando y presionando para que haga cosas que no llevan a nada y se cambie la mentalidad hacia la creación de una cultura de prevención individual, no se puede empezar por el último escalón sin haber pasado por los primeros.

Para la reflexión

J. Raúl Cantón y Lara