Así
iniciaba Renato Leduc su soneto del tiempo, que se hizo famoso interpretado en
las voces de Marco Antonio Muñiz y José José. Y lo anoto porque en parte de
nuestra historia legislativa de Sonora, a mediados del año 2009 la exposición
de motivos de la Iniciativa para la Ley-Decreto 194 decía: “El Estado tiene entre sus
objetivos realizar acciones orientadas a la protección de las personas frente a
los peligros y riesgos de desórdenes o trastornos provenientes de elementos,
agentes o fenómenos naturales o humanos, que puedan dar lugar a desastres y la
consecuente pérdida de vidas, provocación de lesiones, destrucción de bienes
materiales, daño a la naturaleza y, en general, la interrupción del desarrollo
normal de la vida cotidiana”.
De
inmediato, al darse a conocer y previo a su pase al Pleno del H. Congreso, el Consejo INCIDE una vez revisada en lo
general la propuesta, y haciendo nuestra la célebre frase de Benjamín Franklin "Las
leyes demasiado benignas rara vez son obedecidas; las demasiado severas, rara
vez ejecutadas", procedimos a enviar oficio, en dos ocasiones
(julio y agosto), al Presidente en turno del Poder Legislativo solicitándole se
detuviera su aprobación exprés para ser sujeta a revisión y análisis de manera
integral, ya que la medida respondía a un auto-flagelo gubernamental ante la
furia y frustración social producto de la peor tragedia infantil en México.
Obviamente, como la mayoría de las veces sucede, las voces ciudadanas no fueron
escuchadas y la iniciativa fue aprobada y publicada ese mismo mes de agosto de
2009.
El
tiempo transcurrido nos dio la razón, el objetivo no se cumple a cabalidad, la
norma se convirtió en represiva (hasta para la propia autoridad) y nunca
preventiva. Si consideramos a las acciones de inspección y dictaminación como
los esquemas de prevención del riesgo, históricamente, según datos
extraoficiales, de los más de 50 mil establecimientos que según datos del INEGI
se consideraban como sujetos obligados de acuerdo a las supuestos de la Ley,
las autoridades competentes solo han tenido capacidad material, técnica y
humana para atender menos del 4% de ellos, sin considerar que en lo general a
los edificios públicos en ese período no fueron dotados de presupuesto para
cumplir con las condicionantes de seguridad que el propio gobierno exige a los
particulares. Es decir, entramos a un proceso de simulación donde parecía que
el ciudadano cambiaba de estatus de seguridad dependiendo si el establecimiento
era de uso público o privado.
Me
decía una persona que fue funcionario público y a la que le tomé estima por su
Don de gente, “Arquitecto, no te desgastes, no trates de entender, nunca vas a pensar
como político, ni los políticos van a pensar como tú”. Ese concepto lo
reafirmo ya que a veces tengo la ligera percepción de que los políticos se
creen eternos en sus puestos, que no visualizan que, afortunadamente en México,
los gobiernos solo duran tres o seis años, pero percibo también, que no
entienden que la sociedad civil a través de sus organismos intermedios
continúan en el tiempo, y quienes tienen la virtud de la constancia encontrarán
el tiempo adecuado para continuar con sus propuestas.
Pero
bien lo dijo el poeta Arturo Graf, a finales del S.XIX, "La constancia es la virtud
por la que todas las otras dan su fruto". Después de insistir casi
nueve años en el cambio de Ley, la actual Administración Estatal en Sonora
encabezada por la Lic. Claudia Pavlovich Arellano, muestra apertura y dispone
involucrar a varias de sus dependencias y a representantes de la sociedad civil
a trabajar en una propuesta donde si bien es cierto que nadie puede “llevarse
todo el pastel” se genera el consenso en los aspectos que a las partes
benefician en busca del bien social.
Después
de integrarnos en una Comisión Técnica especializada y plural, durante 18
sesiones en el año 2017, trabajamos de manera objetiva en el análisis y mejora
del impacto regulatorio y los resultados que históricamente ha han obtenido con
la actual Ley 161 de Protección Civil, y el pasado 9 de febrero, diversos
organismos de la Sociedad Civil, entregamos al Diputado Carlos León García,
Presidente de la Comisión de Protección Civil del H. Congreso del Estado, un
documento respaldando la iniciativa de Ley de Protección Civil que contiene los
puntos de coincidencia entre las partes y que una vez aprobada, permitirá
trabajar en las normas secundarias para su mejor instrumentación.
Estamos
en la etapa de que la Comisión citada y el Pleno del Congreso hagan su trabajo
de manera eficiente y oportuna, por lo pronto consideramos que en los aspectos normativos, tanto
jurídicos como técnicos, tenemos en proyecto una Ley mejor que la hasta hoy
vigente, que mejore los
procesos de gestión sin menoscabo de la seguridad de la población, y que al
mismo tiempo sea de fácil instrumentación y promotora de su cumplimiento con un
enfoque prospectivo y preventivo en virtud de que se
camina de frente y hacia delante, tomando en cuenta que es una Ley perfectible más no
imperfecta, con sentido incluyente y de corresponsabilidad, que promueve su
cumplimiento, la prevención o mitigación de riesgos y el respeto a los derechos
humanos como política pública de gobierno.
En la parte institucional, en la nueva norma se reestructura la Unidad
Estatal de Protección Civil ahora en figura de Coordinación y como un organismo
público descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, que
tendrá mayor cobertura geográfica y capacidad de respuesta y además, se define
en busca de mayor eficiencia y eficacia en la respuesta a la gestión y atención
de emergencias, una mayor jerarquía administrativa a las Unidades Municipales
de Protección Civil pasando a Coordinación.
En lo normativo presente y futuro de mediano plazo, se armoniza en lo
general a la Ley General de Protección Civil haciéndola supletoria a lo que la Ley
estatal no considera y se vincula en lo general como parte de la política
pública del Ejecutivo Estatal, a la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento
Territorial y Desarrollo Urbano del Estado de Sonora.
En los aspectos de prevención, resiliencia y corresponsabilidad, el
Gobierno del Estado y los Municipios se asumen como sujetos obligados al
cumplimiento de la Ley en responsabilidad y equidad con los particulares, se
formaliza la adquisición a través del FONDES, de instrumentos financieros para
la transferencia de riesgos generados por fenómenos perturbadores naturales y
se redefine la figura de Empresas Especializadas, al garantizar en el proceso
de registro, su calidad y capacidad técnica y otorgándoles corresponsabilidad
sobre los trabajos que realicen en materia de protección civil, lo que
coadyuvará agilizando los procesos internos de gestión al contar con productos
de mayor calidad.
Para el procedimiento de gestión y mejora regulatoria, se redefine el
concepto de “afluencia masiva” eliminando la frase “en un período de 24 horas” con lo que especifica el universo de
sujetos obligados al cumplimiento de la Ley, pero conservando el principio de
seguridad bajo la normatividad municipal; se redefinen también los listados de
establecimientos sujetos obligados aclarando el ámbito competencial del Estado
y los Ayuntamientos en cuanto a la distribución de los sujetos obligados a la
presentación de diagnósticos de riesgo y programas internos de protección
civil, lo que coadyuvará en mejorar los mecanismos de atención a los sujetos
obligados para la gestión del riesgo, sumando con ello al enfoque preventivo.
Por último, en cuanto a la gobernanza en materia de protección civil, queda
el compromiso del Coordinador Estatal de la Unidad Estatal de Protección Civil,
para que una vez promulgada, la instrumentación de la Ley en sus aspectos
generales, se continúe con la participación de la sociedad civil organizada, en
el análisis y reforma del Reglamento de Ley y los Términos de Referencia
aplicables y en las instancias competenciales respectivas.
Continuaremos dando seguimiento al avance en el Legislativo, y por lo
pronto, agradecer a la Secretaría de Economía que a través de la Dirección
General de Mejora Regulatoria (COMERS)
convocó la integración del comité técnico y brindó todas las facilidades
para su funcionamiento, y reconocer la apertura mostrada por Consejería
Jurídica del Gobierno del Estado, Jefatura de la Oficina de la Ejecutivo
Estatal, Secretaría de Gobierno y a la Unidad Estatal de Protección Civil para
llevar a buen término éste proyecto que integra el conocimiento, experiencia y
colaboración para una nueva Ley de Protección Civil para el Estado de Sonora.
…“Como
dice el refrán, dar tiempo al tiempo”…. Nos leemos pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario