IN MEMORIAM
Este viernes 24 de mayo de 2019, recibimos la noticia del desplome de una aeronave
de ala rotativa de la Armada de México, comisionada al combate de incendios
forestales en la Sierra Gorda de Querétaro, en el cual perdieron la vida 5
personas pertenecientes a la Secretaría de Marina, pilotos y mecánicos navales,
así como una persona perteneciente a la Comisión Nacional Forestal, un brigadista
combatiente de incendios. Otra vez un helicóptero militar, como el año pasado.
Hace
poco más o menos 10 años que las aeronaves de las Fuerzas Federales, esto es de
la Fuerza Aérea Mexicana, la Armada de México y la Policía Federal, están
comprometidas para el combate de incendios forestales. Pero hace años también
la CONAGUA e inclusive CFE, participaban en esta muy importante actividad, ya
con recursos financieros, o bien con recursos humanos y materiales, y había
dado resultado. Hoy debería seguir siendo así, pero comprometer a Presidentes
Municipales a coadyuvar en la vigilancia y prevención, así como en el combate y
liquidación es una parte importante también.
Por
un lado debemos ya entender que el Calentamiento Global y el Cambio Climático no son
temas de mesa de café, ni de discurso, ni de plática intrascendente; todo lo
contrario, son temas que estamos viviendo día a día y los miramos de soslayo,
pero continuamos sin cuidar el agua, los bosques, la flora y la fauna; seguimos
contaminando, y construyendo en una confusión de que progreso es eliminar lo
que nos estorba de la naturaleza. Se ha insistido en que mientras más se eleve
la temperatura, por lo menos los fenómenos hidrometeorológicos serán más
agresivos y nos volveremos, a nuestra vez, más vulnerables.
Por
otro lado, sigue sin existir una adecuada gestión del riesgo, confundiendo las
funciones de agencias, sobre exponiendo recursos en algunas ocasiones, o destinándolos
a actividades que nada tienen que ver con la preparación, mitigación o
prevención de riesgos.
Es
imperante, obligatorio ya, que se dé un sentido serio a la gestión del riesgo
de desastres, que de verdad, como ya existe en la Agenda de Seguridad Nacional,
los fenómenos naturales y antropogénicos sean considerados como amenazas
emergentes, y entonces tener la conciencia de poder prevenir, mitigar, preparar
y establecer todas aquellas acciones necesarias para evitar daños a la vida, a
los bienes, y al medio ambiente. La Gestión del Riesgo de Desastre ya no puede
ser discurso, debe ser acción, en los tres órdenes de gobierno, y en todas las
dependencias de la administración pública.
No
sólo en Querétaro se han perdido vidas, sin embargo esta situación fue más
mediática y atrae mucho más la atención. No debimos perder ninguna. Ni dejar
que se consumieran grandes cantidades de hectáreas, ni comparar con años
anteriores; simplemente no debe pasar. Pero para ello se debe aplicar la ley,
tanto para la prevención como para la sanción, y no se ha hecho por varias
razones, entre ellas porque mucha gente ha perdido ya el respeto a la autoridad,
se sienten respaldados porque nadie los va a sancionar y nos estamos convirtiendo
en los “Bandarlog”, cada quien hace su propia ley, para incumplirla y hacerla
cumplir. El resultado lo vemos con quien inicia un incendio, no le pasa nada…
Presento
mis respetos de una manera muy sentida y muy sincera a las familias de los
Brigadistas, Voluntarios y Comisionados que han perdido la vida combatiendo
incendios forestales.
Excelentes reflexiones. Así es, la prevención pudo evitar la pérdida de vidas pero falta tomar en serio los escenarios que está construyendo la sociedad.
ResponderEliminarExcelentes articulo.
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